Un estudio revela que el oriente andaluz alberga casi la mitad de la variedad floral de toda la península
En la investigación, en la que han participado cuatro universidades -entre ellas la UMA- y 77 autores, se ha logrado clasificar más de 3.600 plantas de las 163 familias diferentes que se dan cita en esta zona.
Un estudio realizado por cuatro universidades de Andalucía Oriental -entre ellas la UMA por medio de su departamento de Biología Vegetal- y coordinado por la Universidad de Granada ha visto la luz en forma de libro con la publicación de los cuatro volúmenes de Flora Vascular de Andalucía Oriental, editado por la Junta de Andalucía.
Un total de 77 autores procedentes de centros de investigación de Andalucía y de fuera de la comunidad autónoma han participado en el grueso de este trabajo de más de 1.400 páginas. En este, se clasifican más de 3.600 plantas diferentes o lo que es lo mismo, el 46 por ciento de las variedades que se pueden encontrar en las cerca de 8.000 de las Península Ibérica.
Entre las 163 familias de plantas vasculares representadas en la flora de Andalucía Oriental, destacan las Asteráceas (cardos, girasoles, margaritas, etc.), las Leguminosas y las Gramíneas, pues entre las tres constituyen el 30,5 % del total.
La flora vascular de Andalucía Oriental se caracteriza también por la rareza de muchas de sus plantas. Nada más y nada menos que el 43,7% del total pertenece a las categorías de raras o muy raras, tratándose de especies en muchos casos poco conocidas y en peligro de extinción. Además, la mayor biodiversidad se alcanza entre 700-800 m de altitud, con más de 2200 plantas.
Existen 347 endemismos regionales, es decir, especies que sólo viven en esta zona y que no se encuentran en ningún otro lugar del Mundo. Tales especies excepcionales se concentran especialmente en ciertas áreas, destacando Sierra Nevada, seguida de la zona Trevenque-Almijara, serranías de Cazorla-Segura, zonas bajas de la provincia de Almería y serranías rondeñas.
Las especies de carácter mediterráneo constituyen el 50% del total, siendo más de 500 de distribución íbero-magrebí, lo que indica la afinidad de la flora regional con las zonas septentrionales del continente vecino. Destacan también las especies euroasiáticas, entre ellas las ártico-alpinas, que alcanzan y encuentran refugio en las montañas más elevadas, especialmente en Sierra Nevada.
Más de dos mil fotografías ilustran esta obra que alberga entre sus páginas una pormenorizada categorización y descripción, que va desde la denominación, los sinónimos, el nombre vernáculo, la época de floración o el grado de amenaza de cada una de las variedades.
Por otra parte, y para establecer la distribución en la zona de estudio, se han revisado e incluido en una base de datos creada al efecto, 96.424 especímenes de herbario y 9.775 citas bibliográficas comprobadas.
Más información: Grupo Biodiversidad, Conservación y Recursos Vegetales (UMA)