Referentes del ámbito de la Telecomunicación centran el nuevo capítulo de la serie ‘ConCiencia de Mujer’

El Rectorado acogió en la tarde del miércoles 23 de febrero la presentación al público de una nueva entrega de ConCiencia de Mujer. Se trata del capítulo nueve de la serie que lleva por título ‘Mari Carmen Aguayo presenta a: Hedy Lamarr, Andrea Goldsmith y Teresa Martín’. Rosario Moreno-Torres, jefa del Servicio de Publicaciones y Divulgación Científica de la UMA, recalca que esta colección de audiovisuales “ayuda a la construcción de la identidad de la mujer científica”, ya que con los vídeos “descubrimos figuras femeninas que han quedado en segundo plano, así como sus aportaciones a la ciencia”, al tiempo que “conocemos a las investigadoras que actualmente lideran diversas disciplinas”.

Por su parte, la vicerrectora adjunta de Investigación y Transferencia de la UMA, Zaida Díaz Cabiale, señala que con esta iniciativa “se pretende buscar referentes actuales de nuestra universidad”. En el caso de la ingeniera de telecomunicación y catedrática en el área de Teoría de la Señal y las Comunicaciones, Mari Carmen Aguayo Torres, quien dirige la Cátedra Mujer y Tecnología Hedy Lamarr, quiso destacar su “trayectoria inspiradora” en la que aúna varias facetas: la investigadora, la de transferencia y gestión y, por último, la divulgativa.

Todas ellas quedan plasmadas en el montaje que acaba de estrenarse y en el que su protagonista habla sobre tres de sus referentes: la actriz e ingeniera de telecomunicación que da nombre a su Cátedra; la primera mujer en ganar el Premio Marconi, Andrea Goldsmith y, por último, Teresa Martín, quien fue su profesora y a la que considera un modelo. No obstante, reivindica más presencia femenina en especialidades TIC que, en España, no llega al 20 por ciento, si bien, insiste, se trata de un problema generalizado. Por ello, quiso profundizar en sus posibles causas durante el acto.

En este sentido, la investigadora considera que las empresas tecnológicas necesitan mujeres para obtener una mayor rentabilidad. Asegura que “están convencidas de que es importante que haya mujeres en sus equipos”, puesto que los grupos con diversidad presentan un mayor rendimiento y creatividad, algo esencial para este tipo de compañías que dependen mucho de la innovación para ser competitivos. Sin embargo, cada vez son menos las mujeres que trabajan en firmas del sector.

Según Mari Carmen Aguayo, esta situación se explica por múltiples factores: el contexto socioeconómico y cultural, una socialización diferencial de género y una cultura empresarial masculinizada. La percepción de dificultad o la falta de referentes son “las dos grandes razones por las que las niñas no se interesan por las ingenierías”, asevera. De ahí que abogue por emprender acciones ya desde la educación infantil, implicando a los docentes en materia formativa y prestando especial atención a una materia esencial como las matemáticas.

Respecto al profesorado, la catedrática universitaria pone el foco en asuntos como la escasa presencia de docentes varones en los primeros niveles educativos o el poco peso que se le da en el Grado en Educación a las matemáticas o las TIC (entre un 10 y un 12 por ciento de los créditos). Por ello, solo el 3 por ciento de los maestros de primaria están especializados en Matemáticas, tecnología o TIC.

Por último, Mari Carmen Aguayo concluye que “las tecnologías no son el futuro, sino el presente”. Entiende que urge actuar para evitar que la brecha tecnológica crezca pues cuando “la mitad de la población tiene tecnología sin generarla, crea problemas”. Para tratar de corregir la tendencia, la Cátedra Mujer y Tecnología Hedy Lamarr está planteando una serie de actuaciones dirigidas tanto a las estudiantes, como a sus profesores, así como a la sociedad.