Ayer y hoy de la revista Litoral
04 May 2022
19:00h
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UMA Divulga+
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Luis Melero Mascareñas (del Departamento de Filología Española, Italiana, Románica, Teoría de la Literatura y Literatura Comparada) impartirá esta conferencia el miércoles, 4 de mayo, a las 19:00 horas.

El acto tendrá lugar en la Casa de la Cultura de Benalmádena (Plaza Juan de Austria s/n. Arroyo de de la Miel).

 

Contacto e información:
tertuliasateneo@hotmail.com
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Teléfonos 629722427 - 952446715

Litoral, fundada en Málaga en 1926 por Emilio Prados y Manuel Altolaguirre, a los que prontamente se unió José María Hinojosa, es una de las revistas culturales y artísticas más prestigiosas en castellano. Entre las revistas de los años veinte, Litoral fue sin duda la que reunió con mayor amplitud a prosistas, poetas, dibujantes y tipógrafos alrededor de un núcleo poético específico, una revista literaria de vanguardia que contó y cristalizó con los más valiosos creadores de la que iba a ser la nueva cultura española.

En ese horizonte fundacional de la llamada “joven literatura” de los años veinte —después, generación del 27—, parece haber acuerdo unánime entre historiadores y críticos en considerar que las primeras entregas de Litoral, junto a sus suplementos, fueron para la joven poesía y los jóvenes artistas plásticos del momento un trampolín para las propuestas estéticas más vanguardistas. En 1944, tras la victoria del fascismo y la brutal experiencia de la guerra, se vincula en México a un núcleo del grupo malagueño en los Cuadernos mensuales de poesía, pintura y música bajo el título de Litoral. Entre ellos estaban Manuel Altolaguirre, Emilio Prados, José Moreno Villa, Juan Rejano y un joven Francisco Giner de los Ríos.

Desde su nuevo arranque en 1968, iniciativa de José María Amado y Arniches, la historia más reciente de la revista lleva cincuenta años llegando sin interrupción a nuestras manos. Una publicación periódica que ofreció una mirada nueva y un enfoque distinto al margen de las directrices imperantes del momento. Tal y como apunta Antonio Jiménez Millán: «Litoral, ya no era solo un nombre ilustre vinculado al horizonte fundacional de la poesía de la generación del 27, sino también una referencia imprescindible en la cultura española de los últimos años de la dictadura y, por supuesto, de la transición» (Jiménez Millán, 2006, 183).

En 1975, se incorpora a la dirección el poeta y pintor Lorenzo Saval, sobrino nieto de Emilio Prados. Se alcanzan con él y con el mismo compromiso estético moral acorde con los nuevos tiempos, las 270 ediciones que componen la histórica colección. Sus contenidos la hacen única, y cada edición, junto a la diversidad de temas tratados la convierten en una herramienta de rigor en el estudio de múltiples disciplinas (música, arte o pensamiento, junto a la poesía). Por su relevancia y repercusión internacional, por su configuración durante varias generaciones literarias y artísticas de tanta brillantez durante los siglos XX y XXI, presentamos esta comunicación que toma el testigo a la sugerencia que Francisco Giner de los Ríos (sobrino nieto de su homónimo) lanzó en 1988: «si yo fuera un joven que estuviera haciendo su carrera universitaria en el campo de las letras pediría una beca para elaborarlos [unos índices] como base de un estudio sobre lo que ha significado Litoral en la cultura española e hispanoamericana».

Ayer y hoy de la revista Litoral